Muchos de los protocolos de ejercicios propuestos, en las diferentes lesiones de rodilla, son de carácter global, en el caso de la tendinopatia rotuliana o rodilla del saltador o tendinitis rotuliana, la cual es una inflamación del tendón de la rótula, es una lesión muy poco común en deportistas, pero el tratamiento basado en ejercicios isométricos era un buen método analgésico, esto se dio a raíz de un estudio en el 2.015, en el que se concluía, que los ejercicios isométricos era analgesia en la tendinopatia rotuliana, un poco más tarde en el 2.016, otro estudio concluyo que para combatir el dolor las contracciones isométricas son mejores que las isotónicas. Pero lo más importante en cualquier tipo de lesión es el control motor, y con respecto a ello se ha tenido mucha confusión dentro de la fisioterapia y el entrenamiento por el manejo que se le da y por lo que dicen diferentes autores de él, desde la evaluación hasta los protocolos de trabajo.
Pero el control motor es mucho más, y existen diferentes teorías que pueden definir el control motor, el caso está en la forma como relacionan el control motor con el control de movimiento y son dos términos totalmente diferentes, por ende haciendo referencia a los ejercicios isométricos, estos por no tener movimientos, no quiere decir que sean de control motor.
Así pues cuando hablamos de lesiones, tomamos en cuenta los factores de riesgo que pueden influir en esa lesión, pero la tendencia anterior ha sido separar los factores de riesgo como un factor determinante de lesión, y tenemos que en cierto modo son reduccionista y no atienden a la lesión como tal, de tal modo que no se debe atender a un solo factor, ya que para realizar un buen diagnóstico y una correcta valoración debemos engranar todos los factores de forma global y ver la interrelación de uno con otros y no verlo de manera aislada.
De tal manera que una lesión es difícil que se produzca, y a la vez fácil de recuperar, solo hay que atender a los factores clave, para poder prevenir y posteriormente aplicar un buen protocolo en este caso de ejercicios, de la correcta intervención isométrica en la tendinopatia rotuliana, ya que la base de cualquier tratamiento es el ejercicio y es lo que mayor evidencia tiene como terapia e intervención.
Hablamos entonces de contracción isométrica, y es que se observa que entrenar bajo isometría proporciona hipertrofia muscular y mejora la fuerza muscular, pueden ocurrir cambios a nivel del sistema nervioso central, cortical y hasta en los estudios de electromiografía, por ende al aplicar un protocolo de ejercicios isométricos, ejemplo con el 70%, vamos a producir analgesia durante 45min , un aumento de los niveles de fuerza y cambios a nivel cortical, en comparación con un protocolo de excéntrico y concéntrico a una intensidad de 8RM, ahora bien en estudios recientes del 2.019 se lleva a comparar si la importancia está en el tiempo de exposición a la isometría o la cantidad de repeticiones, numero de series, y se concluyó que no hubo diferencias significativas y el mejor resultado se obtiene a la mayor exposición de la isometría, no hay que olvidar que las características del pacientes son importantes, ya que un adulto mayor por ejemplo no puede llegar hacer una contracción isométrica tal elevada en un 85%.
Podemos decir entonces que, existen cambios en la elasticidad del tendón, tanto en su estructura, como en la función con contracciones que superan el 70% de la máxima voluntaria, y si bien se evidencia que en unos pacientes disminuye el dolor y en otros no, hay que hacer mayor énfasis en la metodología y procedimiento de aplicación porque no todos los pacientes reaccionan de la misma manera al protocolo de ejercicios isométricos.